Mis novelas

Mis novelas
Mis novelas

martes, abril 13, 2021

SAN GASPAR TLAHUELILPAN

-->
DE LIBROS Y OTROS PLACERES


En el límite de Metepec con San Mateo Atenco, se encuentra una de las comunidades del municipio que todavía lucha por conservar su identidad agrícola: el pueblo de San Gaspar Tlahuelilpan. El nombre náhuatl tlaahulilpan significa sobre las huertas regadas. 

Era este pueblo una comunidad matlatzinca, perteneciente a Atenco, donde sus habitantes, gracias a la abundancia de agua, cultivaban verduras y legumbres, con el sistema de chinampas, ése que todavía puede apreciarse en algunos lugares de Xochimilco.

Durante la administración colonial, ya bajo el nombre cristiano de San Gaspar, pues fue consagrado a uno de los tres reyes magos, pasó a ser uno de los doce barrios de San Mateo Atenco, que en ese tiempo era uno de los pueblos de visita del convento de la Asunción de Toluca. Permaneció así hasta 1573, cuando por la mayor cercanía, se sujetó a Metepec.

Los habitantes de San Mateo no estuvieron conformes con ninguna de las dos sujeciones, pues alegaban que su categoría de república de indios no les permitía ser pueblo de visita.  Finalmente, el 23 de junio de 1671, por orden del Virrey don Antonio Sebastián de Toledo, marqués de Mancera, queda separado San Mateo Atenco de la doctrina de Metepec.

Sin embargo, la separación no fue muy clara en la práctica, y a mediados del siglo XVIII, tanto San Mateo Atenco como San Gaspar Tlahuelilpan, aparecen registrados como parte de los 36 pueblos comprendidos en el territorio de la provincia de Metepec, una de las mayores de la Nueva España.

Como parte de la comunidad matlatzinca de Atenco, en San Gaspar las celebraciones principales, antes de la llegada de los españoles, eran yn ichini (águila) el 24 de septiembre; e yn ettuni (flor), el 29 del mismo mes.

Ya cristianizado, celebraba junto con la iglesia principal, el 21 de septiembre el día de San Mateo y, el 6 de enero, Día de Reyes, la fiesta de San Gaspar. Desde luego, también la fiesta de San Isidro Labrador, común a todo el municipio.

La iglesia colonial dedicada a San Gaspar, uno de los tres Reyes Magos llegados de Oriente para adorar a Jesús de Nazareth, fue víctima del terremoto de 1985.  Tuvo que demolerse lo poco que quedó en pie; en su lugar se construyó una capilla moderna. Todavía queda en pie un pequeño convento, que pide a gritos ser restaurado. 

No hay comentarios.:

Soñar...

Mi mayor placer es soñar. Soñar dormida y más, despierta. Dejar volar la imaginación y tratar de convertir esos sueños en palabras.

EL NIÑO BENITO JUÁREZ

--> DE LIBROS Y OTROS PLACERES Un personaje que no debemos olvidar, por su importantísimo legado a la formación de este país, es...